27 de abril de 1833
Querido Diario:
Estamos
ante las elecciones de abril donde se decidirá el futuro de la federación y es
inaceptable, que en este suceso tan importante para la patria toda, no se halle a
la mujer interviniendo en el hecho. No es nueva la falta de derechos con la
que convivimos tantos años y a la cual, estas generaciones comienzan a
reclamarle su inmediato cese. Me sorprende también que hay mujeres a las que no
les importa la falta de derechos, sostengo que hasta no tener los mismos que tienen los hombres, no
voy a detenerme. Algunos están en total desacuerdo con respecto a mi creencia y
mi forma de ver a la sociedad.
Tengo la esperanza que algún día, no importa cuando, ya sea en meses, años o décadas, exista la oportunidad de que las mujeres podamos decidir por nuestro país y por quien queremos que lo gobierne.
En el día de hoy, con las compañeras en la lucha de la causa federal, ante tal desigualdad y teniendo como objetivo siempre, el bien de la patria, elaboramos un documento en el cual proponemos una lista de candidatos a representar a la provincia de Buenos Aires. Acompañando tal lista, siguió una reflexión acerca de nuestros derechos y sobre nuestros sueños de ser tenidas en cuenta en la política. No solo queremos ser quienes acompañan a los hombres, no, no solo eso, sino que nuestro más grande anhelo es llegar a ver la mitad de los asientos de la sala de representantes de la provincia ocupadas por mujeres, firmes, coherentes y con enorme amor por la federación, levantando el país codo a codo con los hombres.
Tal vez simplemente no lo veamos nosotras, no tengo duda, la sociedad rioplatense necesita
un progreso bastante grande para consagrar nuestros derechos, más estoy
convencida, que las futuras generaciones de luchadoras como nosotras, herederas
de nuestra causa, lograran aquel cometido de las mujeres del Siglo XIX.
Citas bibliográficas:
Pignia, Felipe: "Mujeres tenian que ser", Buenos Aires, Sudamérica, 2011